Los avances tecnológicos, de cualquier índole, llevan siglos permitiendo al ser humano mejorar las condiciones de su vida y de sus trabajos. El director comercial de Ludus Global, Iker Saratxaga, ha hecho hincapié en uno de estos avances, que surgió como entretenimiento para el público, pero que poco a poco ha ido ganando un hueco importante en la industria.
Se trata de la realidad virtual, una tecnología que está revolucionando prácticamente todos los sectores económicos, y también lo está haciendo en la construcción. Desde el diseño de viviendas a través de modelos 3D hasta nuevas experiencias comerciales para la venta de inmuebles, hay multitud de ámbitos que pueden expandirse y cambiar gracias a la realidad virtual.
En la edición de noviembre de 2021 de la revista de la Asociación vizcaína de Excavadores excAVE, Saratxaga explica que, a través de la realidad virtual, un arquitecto, por ejemplo, podría interactuar con un modelo a escala real de la estructura plasmada en un ordenador. «Un cliente tendría la oportunidad de visitar el piso piloto sin salir de las oficinas de la inmobiliaria. Sin embargo, la propuesta de Ludus Global va más allá, al uso de esta tecnología inmersiva en la formación de trabajadores de la construcción».
¿Cómo puede ayudar la Realidad Virtual a la formación en la construcción? «Actuar para reducir los accidentes y mejorar la prevención de riesgos es siempre algo importante», afirman desde la compañía vasca. «Programas como los de Ludus Global permiten mejorar los procesos de trabajo y crear entornos formativos seguros a través del uso de la realidad virtual».
Conocer los riesgos a los que se expone alguien dentro de una obra, simular situaciones de peligro o concienciar sobre la importancia del buen uso de los EPI son la parte esencial de este tipo de cursos de formación en seguridad. Y, además, permiten al alumnado y las personas trabajadoras no verse expuestos de manera real a estos problemas.
El uso de la realidad virtual hace que las personas puedan vivir en primera persona todas las tareas de un puesto de trabajo, asumiendo las responsabilidades antes de entrar en contacto con el escenario real. Gracias a esto se pueden evitar multitud de accidentes, ya que conocerá de primera mano cómo enfrentarse a diversas situaciones. Al tratarse de un entorno controlado y digital, pueden modificarse algunos parámetros. Esto permite recrear momentos concretos, añadiendo elementos o estableciendo nuevos objetivos. Con esta herramienta, se puede entrenar y repetir todo tipo de accidentes, permitiendo así que el alumnado aprenda a mantener la calma y a seguir las instrucciones específicas.
De la misma manera, se encontrará multitud de instrumentos y protecciones frente así tendiendo que elegir los elementos más adecuados para cada escenario. Aprender a utilizar y a colocar de forma correcta los EPIs, delimitar zonas peligrosas o reconocer símbolos de advertencia es mucho más sencillo si ya lo has vivido previamente en la realidad virtual.
Una de las ventajas de esta tecnología es la inmersión total, pero sin los riesgos asociados a utilizar materiales reales para practicar. Más allá del peligro que supone hacia el alumnado o la persona trabajadora un mal uso puede provocar grandes gastos para la empresa si algo se estropea. Esto supone que no sea tan sencillo utilizar herramientas reales o, al menos, no poder repetir los ejercicios tantas veces como sea necesario.
Con solo unos minutos de ejercicio se tiene una sensación de realidad absoluta, permitiendo obtener una perspectiva útil y práctica de la formación. Esta se complementa a la perfección con estudios más tradicionales y teóricos, sumando un paquete de experiencias que mejorarán su preparación para el futuro.
Y es que, según informes de Ludus Global, las formaciones tradicionales que se complementan con las prácticas de realidad virtual, mejoran cuatro veces la retención. Así se puede alcanzar hasta el 90% de fijación de los conocimientos adquiridos.
Este tipo de formación con realidad virtual para el sector de la construcción es un modelo a seguir desde hoy mismo. «Se consiguen grandes mejoras en las habilidades y en la reacción frente a situaciones de peligro», insiste Saratxaga. Interactuar en un entorno seguro como el que propone Ludus Global «afianza los conocimientos teóricos y previene de accidentes futuros».